Administración crónica de sildenafil en la hipertensión pulmonar
Diego Echazarreta, Leonardo Mancini, María Curró, Andrés Echazarreta, Carlos Viscuso, Marcelo Portis, Marcelo Uriarte, Sandra Reyes, María Urrutia, Roberto Torrijos, Daniel Marelli
Departamento de Insuficiencia Cardíaca y Trasplante. Servicio de Cardiología y Cirugía Cardiovascular. Hospital San Juan de Dios.La Plata. Buenos Aires. Argentina.
Correspondencia: Dr. Diego Federico Echazarreta
Departamento de Insuficiencia Cardíaca y Trasplante / Servicio de
Cardiología y Cirugía Cardiovascular del Hospital San Juan de Dios
Calle 27 y 70 CP 1900 La Plata / Buenos Aires / Argentina
Tel/Fax
++54 221 4528807
E-mail: dechaza@uolsinectis.com.ar
Trabajo recibido: 03/02/06
Trabajop aprobado: 20/03/06
Introducción y objetivos- La hipertensión arterial pulmonar constituye un hallazgo frecuente dentro de las cardiopatías
avanzadas que son evaluadas para un trasplante cardíaco o pulmonar. Sin embargo, su tratamiento se ha limitado al uso de
cierto fármaco como los bloqueantes cálcicos, anticoagulantes orales y prostaglandinas, entre otras. Recientemente, ha
sido considerado el sildenafil como un fármaco capaz de mejorar las condiciones hemodinámicas de este subgrupo de
pacientes, basándose en sus cualidades vasodilatadoras selectivas del lecho vascular pulmonar.
Pacientes y método- Se seleccionaron 40 pacientes (33 mujeres) con diagnóstico previo de hipertensión pulmonar severa,
en capacidad funcional III. Se constituyeron dos grupos: Grupo A, al cual se le adicionó al tratamiento de base, sildenafil
iniciando la administración con 50 mg, hasta obtener un valor deseable de 150 mg, y un Grupo B control. Se realizaron
evaluaciones mediante la “prueba del pasillo de los 6 minutos” y la cateterización ventricular derecha al inicio y a los 6
meses del seguimiento.
Resultados- Los resultados arrojaron un descenso significativo estadísticamente en los valores de la presión arterial pulmonar
media (69±3 / 49±3 mm Hg t=21 p:0,000) y de la resistencia vascular pulmonar (1866±11 / 948±7 dinas.s-1/cm-5t=3,24
p:0,0002) mediante el uso de la cateterización selectiva de la arteria pulmonar, acompañados de una mejoría significativa
en el “test de la caminata de los 6 minutos” (156±9 / 203±7 metros t=-22,798 p:0,000).
Conclusión- El uso de sildenafil en dosis promedio de 103,75 mg/24 hs ha demostrado, en la presente muestra, producir una
mejoría en el perfil hemodinámico con aumento significativo de la capacidad funcional.
Palabras clave: Sildenafil; Hipertensión pulmonar; Insuficiencia cardíaca; Trasplante
Summary
Introduction and objectives- Pulmonary hypertension is a
common illness in patients waiting for a heart or lung transplantation.
However, its treatment has been reduced, only to
the calcium antagonists, oral anticoagulation and prostaglandins.
Recently, sildenafil has been used for improvement the
hemodynamic state of this group, taken account the vasodilatation
capacity of the pulmonary bed.
Patients and methods- Observational study of 40 patients (33
women and 7 men, mean age) with previous diagnostic of pulmonary
hypertension and functional capacity (New York Heart
Association classification) II-III. Two groups: Group A with
means of sildenafil 103.75 mg/day and Group B with controls.
Baseline, six-month follow-up were based on functional capacity
(six minutes walk test) and right ventricular catheterization.
Results- We found a significant decrease of the pulmonary arterial
pressure (69±3 a 49±3 mm Hg, t=21 p: 0,000) and the
pulmonary vascular resistance (1866±11 a 948±7 dinas.s-1/cm-5
t=3.24 p: 0, 0002). The Group A improves the Six Minute Walk
Test in a significant statistic way (156±9 a 203±7 metros t=-
22,798 p: 0,000). No significant adverse effects of sildenafil
were detected.
Conclusions- Using sildenafil mean 103.75 mg per day, our
patients, improve hemodynamic profile and functional capacity.
Key words: Sildenafil; Pulmonary hypertensionn; Heart failure; transplant
Introducción
Se define la hipertensión arterial pulmonar (HP) como un
grupo de enfermedades caracterizadas por el aumento progresivo
de la resistencia vascular pulmonar (RVP) que conduce
al fallo del ventrículo derecho (VD) y la muerte prematura.
Durante el año 1998, la Organización Mundial de
la Salud (OMS) llevó a cabo una clasificación privilegiando
los mecanismos implicados en su desarrollo más allá de
las patologías concomitantes. Esta clasificación fue modificada
y adaptada por el Grupo de Trabajo sobre el Diagnóstico
y Tratamiento de la Hipertensión Arterial Pulmonar
de la Sociedad Europea de Cardiología, a través de la
reciente publicación de las Guías de Práctica Clínica sobre
el diagnóstico y tratamiento de la hipertensión arterial pulmonar1.
La elevación de la presión media en la arteria pulmonar por
encima de 25 mm Hg en reposo ó 30 mm Hg durante el
ejercicio constituye suficiente criterio para definir su presencia.
Aunque la hipertensión arterial pulmonar idiopática (HPI)
es muy poco frecuente (1-2/millón de habitantes), la hipertensión
arterial pulmonar grave asociada a otras patologías
es más común.
El pronóstico de esta enfermedad es muy pobre y las opciones
de tratamiento muy escasas. En general, este último se
ha limitado a indicar una reducción sustancial de la actividad
física con especial mención al ejercicio isométrico2, la
administración de digoxina (en los casos con severo déficit
contráctil ventricular derecho y/o izquierdo)3, diuréticos y
oxígeno suplementario en pacientes con desaturación en
reposo4. La infusión endovenosa de prostaciclinas (iloprost
inhalado, teprostinil, beraprost)5-7 en pacientes con CF IIIIV
ha demostrado mejorar el pronóstico de estos pacientes, al igual que los antagonistas de los receptores de la endotelina
(bosentán, sitaxentán, ambrisentán)8-10.
Los bloqueantes cálcicos se indican usualmente ante una
respuesta positiva al test de vasorreactividad aguda, lo que
permite suponer una mejoría en la CF en los cinco años siguientes11.
La anticoagulación oral crónica con dicumarínicos12,13 (INR 2,0-2,5) se encuentra indicada en la actualidad,
según reportes que han demostrado una mejoría significativa
en el seguimiento a largo plazo. La indicación de
septostomía auricular ha quedado reducida a la presencia
de síncope recurrente, insuficiencia ventricular derecha a
pesar del tratamiento médico máximo o como puente al trasplante14.
La mortalidad de esta intervención es alta y queda
reducida a centros con experiencia suficiente en el uso de
dicha técnica.
Otro mecanismo, recientemente detallado en diferentes publicaciones15-21, es la inhibición de la fosfodiesterasa-5 (PDE-
5) con la consecuente elevación del monofosfato cíclico de
guanosina (GMPC) y vasodilatación arterial pulmonar mediada
por la liberación de óxido nítrico. El sildenafil utiliza
este mecanismo, logrando obtener reducciones significativas
de las resistencias vasculares pulmonares (RVP) sin
descenso significativo de las sistémicas. Un reciente trabajo
comparativo junto al epoprostenol, en pacientes portadores
de HP secundaria a fibrosis pulmonar, ha demostrado su
mayor eficacia en la reducción de las RVP22.
En una población con una expectativa de vida reducida como
la referida y con escasas herramientas terapéuticas con verdadero
impacto en la calidad de vida, el sildenafil se ha sumado
como una alternativa más para su evaluación y consideración.
Población y métodos
Durante el período comprendido entre los meses de abril de
2002 y mayo de 2003, fueron referidos al Departamento de
Insuficiencia Cardíaca y Trasplante de nuestro hospital 75
pacientes con el objeto de ser sometidos a una evaluación
pretrasplante cardíaco y/o pulmonar. Fueron seleccionados
40 (33 mujeres edad: 42±9) con diagnóstico de HP severa
llevado a cabo mediante la realización de un ecocardiograma
transtorácico 2D Doppler color y cateterización derecha
con catéter de Swan-Ganz. En el caso de los restantes 35
pacientes, no reunieron los criterios necesarios para categorizar
su HP como severa.
Para la realización del estudio ecocardiográfico se utilizó un equipo Ultramark® 9.0. La presión en la AP se obtuvo
aplicando, al gradiente de presión en la insuficiencia tricuspídea
(IT), la suma de un valor de 5 mm Hg cuando la vena
cava inferior (VCI) colapsaba completamente en inspiración,
10 mm Hg si el colapso era parcial, 15 mm Hg si no
existía colapso y 20 mm Hg si existía distensión de la VCI
en inspiración.
La cateterización selectiva y medición de presiones en la
AP se llevó a cabo con un catéter de Swan-Ganz de 7.0 French
y Equipo Siemens® para la medición de presiones intracavitarias.
Se definió HP a las presiones medias en arteria
pulmonar que excedían los 25 mm Hg. Los pacientes seleccionados
eran portadores de HP de origen: idiopática (HPI):
2; síndrome de Eisenmenger (EE) atribuido a defecto septal
interauricular: 14 y ventricular: 3; esclerodermia (Escl): 1;
artritis reumatoidea: 3; lupus eritematoso sistémico (LES):
3; HP secundaria a estenosis mitral sometida a reemplazo
valvular: 4; HP secundaria a insuficiencia mitral con disfunción
ventricular izquierda: 5 y tromboembolismo pulmonar
recurrente (TPR): 5. Los pacientes portadores de HP
secundaria a enfermedades del colágeno fueron evaluados,
diagnosticados y sometidos a tratamiento crónico de su patología
de base por el servicio de reumatología de nuestro
hospital.
Se realizó un estudio comparativo y observacional constituyendo
dos grupos, a saber: Grupo A y Grupo B cuyo seguimiento
se llevó a cabo por los cardiólogos clínicos de
nuestra área. Las características de la población seleccionada
pueden observarse en la Tabla 1 y la etiología de la HP
en la Tabla 2. Analizadas todas las variables no se encuentran
diferencias estadísticamente significativas con lo que
constituyen ambos grupos una muestra homogénea.
Al Grupo A, le fue administrada una dosis creciente de sildenafil,
iniciando con 25 mg cada 12 hs hasta alcanzar, como
máximo, un valor deseable de 150 mg, dividido en tres tomas
diarias, sumado al tratamiento habitual de cada pacientes
que se detalla en la Tabla 3. El Grupo B constituyó el
grupo control. Todos los pacientes ratificaron su conformidad
por escrito, permitiendo su inclusión en el estudio y el uso de la información obtenida.
Tabla 1 Características de la población
Tabla 2
Etiología de la Hipertensión Pulmonar
El seguimiento médico se extendió durante 180 días, en forma
ambulatoria, a través de los consultorios del Departamento
de Insuficiencia Cardíaca y Trasplante de nuestro hospital. Finalizado
ese lapso de tiempo se repitió la medición invasiva
con catéter de Swan-Ganz en ambos grupos.
El análisis estadístico fue realizado mediante el uso de los
de Student (“t”) para las variables continuas y el test de las diferencias
de proporciones para comparar los porcentajes.
Resultados
En la Tabla 4, se ilustran los resultados del perfil hemodinámico
obtenido en los Grupos A y B en el día 1 y 180 del seguimiento.
En la Tabla 5, a su vez, puede observarse el aumento altamente
significativo de los metros recorridos en el “test de la caminata
de los 6 minutos”. Si bien ambos grupos resultan mejorar en
forma significativa la tendencia, es claramente más favorable
al grupo bajo tratamiento con sildenafil.
En 3 casos fueron referidos episodios de cefalea y congestión
nasal sin evidenciar algún otro efecto adverso durante el período
de seguimiento.
Tabla 4 Comportamiento hemodinámico
Tabla 5 Prueba del Pasillo de los 6 minutos
Discusión
Recientes publicaciones han profundizado sobre los aspectos
fisiopatológicos involucrados en el desarrollo de la HP.
La vasoconstricción, la proliferación de células musculares
lisas y/o endoteliales y la trombosis constituyen fenómenos
presentes en la génesis y desarrollo de esta patología, a través
de la persistente inhibición, reducción o abolición de
los mecanismos propios que facilitan la vasodilatación del
músculo liso vascular pulmonar produciendo cambios conformacionales
de la estructura propia de la pared (calcificación
de Heath y Edwards23), así como también la reducción
de las funciones autócrinas y/o parácrinas del endotelio vascular.
Tal es el caso de la fenfluramina (anorexígeno) que
ha demostrado reducir la acción de la óxido nítrico sintetasa
y por ende disminuir la producción de óxido nítrico, principal
vasodilatador arterial biológico existente hasta la actualidad.
La etiología más frecuente se asocia con las colagenosis
vasculares, principalmente la esclerodermia, incluso el
síndrome de CREST (calcicosis cutánea, fenómeno de Raynaud,
disfunción esofágica, esclerodactilia y telangiectasias) y la
enfermedad mixta del tejido conectivo. La HP también es relativamente frecuente como fenómeno secundario a la administración
de determinados fármacos (ej: anorexígenos) o en
las cardiopatías congénitas, especialmente aquellas con comunicaciones
del tabique interventricular o con persistencia del
conducto arterial24.
También debemos mencionar a la HP secundaria a trastornos
del sistema respiratorio y/o hipoxemia, HP secundaria a enfermedad
trombótica y/o embólica crónica. Otras etiologías principales
son las cirrosis con hipertensión portal y las infecciones
por HIV25.
En ciertos pacientes el aumento de la resistencia al flujo sanguíneo
provoca un fenómeno conocido como HP “pasiva”, ya
que muchas veces se observa un aumento de la presión arterial
pulmonar sin elevación de las resistencias vasculares respectivas.
Con frecuencia también puede describirse la presencia de
presiones y resistencias excesivamente elevadas que no pueden
ser explicadas por la sola obstrucción al flujo sanguíneo “hacia
abajo”. Su comportamiento pareciera depender del grado de
cronicidad y de la presencia de una HP “reactiva”, tesis aún no
demostrada fehacientemente26.
En este contexto, la apropiada utilización de vasodilatadores
que modulen las acciones biológicas disminuidas, mejorando
la relajación del músculo liso vascular pulmonar, ha sido considerada
una opción valida en este especial subgrupo de pacientes.
El sildenafil es un inhibidor selectivo de la fosfodiesterasa específica
tipo 5 (PDE-5) que actúa sobre el monofosfato cíclico
de guanosina (GMPC) principal activador de la relajación del músculo liso arterial. Su farmacocinética es proporcional a la
dosis. La concentración plasmática máxima se alcanza a los 30-120 minutos (media de 60 minutos) y su metabolismo es principalmente
hepático. Su unión a proteínas es del 96% al igual
que su metabolito principal. La acción selectiva sobre el lecho
vascular pulmonar del sildenafil probablemente refleje la elevada
expresión de la isoforma fosfodiesterasa-5 que también
ha sido aislada en el miocardio, significativamente reducida en
el síndrome de insuficiencia cardíaca27.
Recientemente han sido publicados los resultados de un estudio
aleatorizado con diseño cruzado que consistió en la administración
de 25-100 mg de sildenafil 3 veces al día en 22 pacientes
con CFII-III de la NYHA, mejorando sus síntomas al
cabo de 6 semanas de tratamiento, así como también, las variables
hemodinámicas28.
En el Congreso de la American College of Chest Physicians en
octubre de 2004, fueron presentados los resultados de un importante
ensayo clínico aleatorizado realizado en 278 pacientes
portadores de HP con CF II-III de la NYHA, donde la administración
de 20, 40 y 80 mg de sildenafil en tres tomas diarias
mejoró la prueba del pasillo de los 6 minutos en 40 metros,
reduciendo en 5 mm de Hg la PAPM en la semana 12 de tratamiento.
En nuestro estudio, el sildenafil, administrado en dosis promedio
de 103,75 mg/24 hs, permitió disminuir en forma significativa
las RVP y aumentar el VM en relación al tratamiento tradicional
de este grupo de pacientes.
La presencia de descensos acentuados de la presión capilar pulmonar
con aumento del VM en el Grupo A, nos permite inferir
que el fármaco no presenta efectos inotrópicos negativos en el
subgrupo evaluado. Tampoco hemos hallado diferencias en la
frecuencia cardíaca con la administración del sildenafil que
pudieran justificar el aumento del VM, adjudicándoselo exclusivamente
a su efecto sobre las RVP.
Aunque este estudio presenta limitaciones relacionadas con el
reducido número de pacientes y la rareza de la patología, se
encuentra en la línea de los estudios publicados hasta la fecha,
en el sentido de demostrar un beneficio.
Conclusiones
La administración de sildenafil en dosis entre 50 y 150 mg/24
hs (promedio de 103,75 mg/24 hs) a pacientes portadores de
HP severa de diferente etiología que han padecido un deterioro
significativo de su CF, a pesar del tratamiento farmacológico
tradicional, ha permitido, en nuestro estudio, mejorar las variables
hemodinámicas mensuradas y la CF evidenciada a través
del “test de la caminata de los 6 minutos”.
Un mayor número de estudios randomizados deberán desarrollarse
para evaluar su seguridad en el largo plazo y sus efectos
en la sobrevida.
Agradecimientos
A los Dres. Jaime Candell Riera y Jorge Bordagaray por sus
oportunas críticas y contribuciones; al aporte brindado por el
Servicio de Hemodinamia del Hospital San Martín de La Plata
mediante la realización de las monitorizaciones hemodinámicas.
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